LLAMADOS PARA BENDECIR

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En una estación del tren en una estación en Alemania, un turista observa a un hombre que trabaja limpiando la estación; y mira como este hombre barre toda la basura que tiran las personas, cuando termina de barrer y de limpiar, comienza de nuevo a limpiar, y encuentra nuevamente que las gentes tiran basura, pero este hombre ni se inmuta, sabe que es su trabajo; de igual manera, no creo que haya alguien sobre la cual no se halla tirado basura; injusticias, abusos, mentiras, castigos emocionales y quizás físicos, y esto muchas veces no lo vamos a poder evitar.
 Sofía es una joven rebelde, ella toma sus decisiones y no toma en cuenta a sus padres; llega a la hora que quiere  y una noche que llega tarde, además de haberse ido  sin permiso, tiene una fuerte discusión con su mamá y esta sin pensar y llevada por la ira, la maldice, deseándole que toda su vida sufra, así como Sofía está haciéndolos sufrir a ella y a su esposo. Sofía no toma en cuenta sus palabras y sigue con su vida, pagando con el tiempo por sus errores y sus malas decisiones y además sufriendo cada día de su vida, el maltrato de su esposo.
Emilia al divorciarse de su esposo, cambia de la noche a la mañana su estatus económico y se ve teniendo que trabajar, para sus necesidades básicas, además al mirar que su ex esposo, goza de una buena situación financiera, su corazón se llena de resentimiento y de odio, y vive maldiciendo a su ex, deseándole que fracase en sus negocios y se vaya a la ruina. Además dedica mucho tiempo, envenenando a sus hijos en contra de su papá, a tal grado que sus hijos ya no quieren verlo.
El corazón es tan fácil de enfermar, de envidias, de resentimientos, de ira y de odio en contra de nuestro prójimo, llámese como se llame, hijo, papá, mamá, esposo, esposa, suegra, jefe, pastor, vecino, etc. Y quizás humanamente tenemos razones en algunas ocasiones, para estar molestos con alguna persona, pero debemos de saber manejar esa molestia, para que se aleje de nosotros y no termine en odio o en rencor, porque los más afectados somos nosotros mismos y además podemos marcar la vida de las personas que estamos deseándoles el mal. Vimos como el hombre de la estación, se tomaba el tiempo para limpiar la basura que la gente tiraba, si nosotros no limpiamos nuestro corazón, voluntaria o involuntariamente abrimos puertas de maldición para nosotros, porque Dios no va a bendecir una vida, cuyo corazón desea el mal,  y al hablar de bendición, no hablo de bendiciones económicas, porque hay mucha gente que hace el mal y maldice al prójimo y le va bien económicamente; hablo de una bendición integral. Hay hogares y familias que son un desastre, hay vidas que son un desastre, no hay paz, no hay armonía. Jesús dijo Amen a sus enemigos, bendigan a quien los maldice, hagan bien a quien los aborrece y oren por los que te lastiman. Mateo 5:44 .
Quizás tienes mucho tiempo enojado o enojada con la vida misma, por tu infancia arrebatada, por tus carencias económicas o afectivas, por pérdidas de un ser querido, por no tener un hijo, o por no haber hallado el verdadero amor, o quizás la pareja que escogiste, te ha hecho tu vida muy desgraciada. Pero mientras no sanes tu corazón y además se llene, primero del amor de Dios y después de amor por mi prójimo, se va a llegar a la vejez, con muchas insatisfacciones, con amarguras, culpando a mucha gente por sentirnos así.
La madre de Sofía sufrió en carne propia al ver como su hija, era maltratada por su esposo, y no se, si se arrepintió de haber maldecido a su hija, pero nunca le pidió perdón. Sofía acepta a Jesús y un día se acuerda de las palabras de su mamá; pero ella ya había muerto, pero ella ora así Madre se que me deseaste mal,  pero también sé, que lo hiciste en un momento de coraje y sin saber las consecuencias  de esas palabras, pero te perdono, y te pido Jesús que transformes en bendición su maldición.
Emilia pierde a uno de sus hijos en un accidente, dejando todavía más vacío y dolor en su vida y en su corazón, sin embargo al perder  a su hijo así, decide pedirle perdón a su ex esposo y cerrar ese círculo en su vida. Pero lo que le dio la fuerza para hacer esto, fue que al aceptar a Jesús en su vida ,su corazón fue sanado.
Las palabras tienen un efecto integral en nosotros, ya que nos pueden destruir, o ser los cimientos para una vida bendecida. La muerte y la vida están en poder de la lengua, y el que la ama comerá de sus frutos. Proverbios 18:21.

Recuerda que con el corazón se cree para justicia, y con la boca se confiesa para salvación, para vida, para paz, para ser feliz. Y después de la confesión viene la acción,  la forma de accionar es: "Finalmente siendo todos de un mismo sentir, compasivos, amándonos fraternalmente, misericordiosos, amigables,, no devolviendo mal por mal, ni maldición por maldición, sino por el contrario, BENDICIENDO, sabiendo que fuimos llamados para heredar BENDICION"